Caldito Caliente para el alma.
Tengo 10 años, estoy en casa de mi abuela, la cual llamamos: la Babi. Vive en la calle de Agustin Melgar entre jacarandas y hermosas avenidas. Su departamento es grande y luminoso, pristino e impecable. Ella es una mujer alta y bella de ojos color del cielo y una mirada algo triste y sabia. Sus manos grandes y redondas estan adornadas de pecas y un gran anillo ( hoy parecidas a las mías), sus labios son rosados y su pelo plateado. Mi Babi tiene un aroma a campo y su energia es poderosa y sabrosa como su comida.
Hoy festejamos "pesaj" la fiesta de la libertad, como mi mami nos explicaba, hoy festejamos la liberación de nuestras cadenas mentales, muy sofisticado para mi edad, pero esta es la fiesta en el año que mas me gusta. Mi madre nos ha mandado hacer unos vestidos que son largos y de una tela delgadita y nos sentimos como princesas de cuento. Nos emociona ir a una cena "tan formal y elegante".
La mesa es larga con mantel y servilletas almidonadas, platos grandes y chicos pintadas con flores de naranjo, cucharas grandes y chicas, muchos tenedores y todo tipo de cuchillos, copas de todos tamaños, flores, vino kosher dulcísimo, salsa de raíz fuerte (hrein) y un plato al medio con un pescuezo de pollo, hierbas amargas, una mezcla dulce de nueces y fruta y un huevo duro.
Durante el dia hemos comido poco se nos avecina una gran comilona. Nos cuentan la historia de Moisés, metemos nuestros deditos dentro del vino y asi alejamos las pestes y la maldad. Me llama la atención que no agradecemos a esta hermosa mujer en la cabecera, mi Babi, por sus horas en el mercado y la cocina para preparsrnos tan exquisito festín.
Le ha tomado 10 dias preparlo, fue al mercado de San Juan, donde, curiosamente, Juanito, le ayuda desde que ella entra al mercado gritando su nombre. Le trae una silla, le trae un pan dulce, un café con leche y la acompaña con el pescadero, el que le vende el pecho de ternera, el de las tripas, la de las verduras. Todos la quieren.
Luego hace un platillo por dia, hace pastel de queso, de chocolate con harina de matza, hace una deliciosa compota de frutas muy mexicanizada con mango niño, ciruelas rojas, chabacanos y capulines.
De toda esta cena, hoy recuerdo, su caldo de pollo con "matza balls" , una por persona. El caldo es tan transparente y tan lleno de sabor y esa gran bola tiene cebollita dorada y grasa de gallina. Estos sabores continúan en mi paladar. Nada como un buen caldo, el que restaura la salud, el que abraza el alma y cura corazones rotos.
Mi mami heredó esta habilidad para el buen caldo, le toma horas y horas, lo hace con muchas alas de pollo, con apio, ajo y cebolla ... lo llena de amor y esperanza, es su amor el que cuando lo como cura mi desesperanza y me lleva a un lugar en el cielo.
Me postro ante este linaje de mujeres y de guerreras que sobreviven y viven, que su amor es inconmensurable y sin condiciones. Les doy las gracias por sus caldos calientes ...
Caldo de amor
ingredientes: 8 alas de pollo limpias, 4 ramas de apio, 1/2 taza de poro rebanado, 3 cebollas de rabo, 4 dientes de ajo, 5 ramas de cilantro, hojas de hierbabuena, 1 zanahoria, 1 nabo, sal y agua.
preparacion:
1.- Ponga a hervir 4 litros de agua y luego vierta todos los ingredientes y poca sal. Tape.
2.-Deje hervir a fuego muy lento por aproximadamente 3 horas.
3.-Cuele el caldo y agregue: verduras o pasta, o sirvalo acompañado con cilantro, chile verde y cebolla.